Me aterra ver como cada día que transcurre los cubanos se sumergen en el atraso y la ignorancia.
Nadie hace nada por tratar de despertar a esa masa acéfala, inculta, obediente, sumisa, con las mentes adoctrinadas manipuladas por el poder, que los convierten en algo manejable, moldeable y grosero.
No, yo no formo parte de esa gentuza tropical y humanoide, a la que llaman pueblo de Cuba. Yo me proyecto en los cubanos de valor recipientes de la gloriosa cultura y saber española, que desde el luminoso siglo XIX dieron lugar al nacimiento nacional de los cubanos y la cubanía.
Cuba no es el resultado del descubrimiento de tribus africanas. Cuba no fue descubierta por una tribu africana. Los cubanos somos el resultado de una inmensa y gloriosa cultura hispana que dio lugar a toda una verdadera civilización castellano-aragonesa primero y española mucho después, de adelantos y desarrollo en el saber y el hacer continuados.
Ningún graduado de las diferentes escuelas de arte y lenguas que existen en La Habana y el resto de la isla piensan, escriben y hablan en Yoruba, Swahili, Igbo, Ngambue, Kikongo etc, etc. etc.
La lengua de Cuba es el español aunque comenzamos a hablar y pensar con el castellano.
En esas lenguas, hasta los mismos africanos que llegaron a Cuba comenzaron a convertirse en personas humanas.
La esclavitud española practicada en la isla de Cuba, fue un gran paso de adelanto en el saber y desarrollo cultural entre los esclavos africanos, mayas, chinos, gallegos que arribaron a la isla. Hay que reconocer y decir, que algunos esclavos africanos y mayas, aprovecharon las posibilidades de desarrollarse que le dieron los esclavistas españoles, pero, la gran masa se quedó detrás.
La revolución cultural que hicieron los curas jesuitas representados por los Castro y sus bandoleros en Cuba nos ha llevado a un sitio oscuro y sin salidas.
Pensemos algo, si fuera verdad que esa figura inventada del tal San Lázaro existiera y que protegiera a alguien, estos protegidos han sido los Castro, sus bandoleros y su espeluznante gobierno y estado.
El gobierno castrista es el resultado del buen trabajo de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y del Vaticano para destruir y arrasar con el estado-nación cubano.
Fidel Castro siempre fue un agente secreto del Vaticano primero y de la CIA después.
Esas cosas humanoides que vemos arrastrarse por el suelo en desesperadas promesas religiosas a un santo que nunca existió es el buen trabajo de la CIA y de los curas jesuitas. Esa inmundicia de atrasadas creencias y supercherías, no es una religión.
Todos esos enloquecidos creyentes de esas supercherías y mitología inventadas, son el resultado de un proyecto científico, de una locura colectiva ideada por expertos antropólogos, psiquiatras y otras especialidades científicas en moldear y manipular mentes, que han hecho de la muchedumbre humanoide que habita la isla en esa cosa horrible que hoy la sobrevive.
Julio Soto Angurel.
